domingo, 2 de octubre de 2016

Hacer por el otro

Una de las cosas que más rencor genera es hacer algo pensando constantemente en la opinión de otro

Idiota

¿Aún sigues con la cantinela de la decepción? ¿Tan idiota eres de seguir pidiendo peras al olmo?

Depender de uno mismo

Depender de uno mismo significa hacer lo que uno piensa que tiene que hacer. Asume la responsabilidad. Dice: "sí, yo lo hice". Y sabe que perderá algo, pero también sabe que ganará en pureza y claridad.

Al final, quien está dispuesto a perder es el que puede ganar algo que de verdad le pertenezca. Ya no quiere regalos, quiere victorias.

Madurez

Asumo lo que he hecho. Independientemente de lo que digan los demás, juzgo mis actos en base a la reflexión que he hecho.

sábado, 1 de octubre de 2016

La vida misma

Aquí, algunos años después. Con una niña maravillosa de 3 añitos. La persona más maravillosa del mundo. Sí, así lo pienso. No es que sea la mejor. Simplemente me hace sentir importante en su vida. ¿Hay prueba más maravillosa de amor que esa?

Pero el tema no es mi hija. O sí. Si lo de lo que venimos a hablar es de amor.

De qué vamos a hablar si no es de amor. ¿No es lo verdaderamente importante de verdad en nuestra miserable vida? ¿No es el amor lo que verdaderamente nos mueve? Dinero, salud, estatus social... Sí, pero sólo si alguien nos ama. Si no te ama alguien (pero alguien venido de fuera, alguien que ha venido a amarte, es decir, amor no familiar), todo lo demás no hace sino mostrar su sempiterno vacío.

Amar tiene muchas aristas, pero quien ama, sufre y, contradictoriamente (o no), quiere no sufrir. Quien ama quiere gozo, placer, alegría... etc. Pero muchas veces, sino las más, encuentra el rechazo, la resistencia al englobamiento en lo mismo.

Amar es, digo yo, sentirse en lo mismo. Pero en lo mismo como camino. Amar implica un otro y un destino. Un destino a todas luces incierto. No es siquiera un destino al que llegar, sino que es más bien una flecha, una acción de ir, de andar. Es el impulso de crear. Pero no es el impulso de crear algo. Más bien es el impulso que está creando. O menos finolis. Es el impulso que hace andar en lo que está andando.

Pero, ¿puede ser eso el amor cuando no anda, no crea, no anhela un destino? No.
El amor no correspondido no es amor. Es algo que quiere pero no puede. Es el amor de uno sobre otro. Es el desamor. La decepción de lo que quiere andar pero no puede. Si no puede, no anda. Si no anda, no desea, sólo desea desear. Es lo que llamamos MIERDA. La mierda del desengaño, de la ilusión, de la esperanza que cae al ver que era eso, sólo una esperanza.

Conclusión: no se ama de esperanzas. Simplemente, se está en el amor o no se está. Y quien ama, lo sabe. Lo sabe de la manera que se saben estas cosas: gozando.

Conclusión 2: Desamor y amor. La matemática quizás sea la manera de saber si tiene sentido volcar tu amor en alguien.